Comunicación en pareja | meditación de Luna llena en escorpio

Noelia y yo antes cerrando la ceremonia

 Namo Zen celebra y conmemora, por medio de meditación y conciencia, a la luna llena.

Tuve el honor y alegría de guiar la meditación de la mano de Noelia Madiedo, fundadora de Namo Zen y buena amiga con quien soñamos con proyectos que sumen a la comunidad, que sanen y que sirvan en el camino del despertar de la conciencia. 

Justo cuando comencé a compartir sobre el tema en el que decidimos reflexionar: la comunicación con la pareja, vi varios pares de ojitos apretarse recibiendo los mensajes. Siempre que hablamos del corazón, hay algo que nos llama y nos toca, porque el amor es eso que nos incumbe a todos, que nos hace vibrar, sufrir y sentirnos vivos. 

Cuando escogemos una pareja y tomamos la decisión de vivir la vida con él/ella –entiéndase desde que te cases hasta que generes un estable compromiso sin necesidad de matrimonio– nos convertimos en un equipo. Un equipo que trabaja y vive la vida  para velar por cada uno. 

Como en todos los equipos, la mentalidad del individuo debe de abrirse a pensar ahora en el bien del equipo, no solamente en el bien de sí mismo. No te quiero confundir ni deseo que pienses que no valoro la individualidad, para nada, la individualidad y autenticidad hacen parte fundamental para que el engranaje de esa máquina de amor funcione.

Sin embargo, si el futbolista agarra la pelota del otro lado de la cancha y corre solo para meter un gol para él figurar como el fregón, pues entenderás que eso no es pensar en el equipo, pues por él quedar bien pudo arriesgar una jugada que podría haber sido importante para el equipo. Ojo con el ego. El ego siempre agarra la bola y sale corriendo sin decir agua va. 

Por supuesto, la individualidad y autenticidad de cada uno de los jugadores es lo que los lleva a ocupar sus espacios, sus lugares y a tener sus responsabilidades y roles. Igual debe funcionar en la relación. 

La comunicación es lo principal para que el equipo funcione. Si no somos claros y hablamos desde el corazón, no hay forma de que la relación aguante. Hay que meterse en la cabeza que la única manera para que dos personas puedan convivir felizmente es comunicándose, escuchándose y comprendiéndose, teniéndose compasión en sus propios procesos y tratándose con el mismo amor que tratarían siempre a un niño. 

He visto problemas solucionarse con solo dos personas comunicarse desde el corazón, no desde el juicio ni la victimización, sino desde el "yo siento" y cuando una persona deja de señalar al otro y se señala a sí mismo como una persona vulnerable y con necesidad de amor, entonces hay magia. 

La comunicación desde el amor puede ser compleja de practicar al inicio, estamos llenos de vicios y aberraciones a la hora de comunicarnos, o a la hora de no comunicar nuestras emociones y nuestros verdaderos deseos o intenciones. 

Cuando el amor es el filtro, todo llega a un acuerdo, a un punto medio, a un entendimiento del otro, a un reconocerte como humano en los ojos de tu pareja y saber que esa persona frente a ti siente la misma compasión y amor incondicional por tu ser. 

Entonces no hay necesidad de pelear porque se puede tener una conversación en la ambos expongan su punto con amor, no hay necesidad de gritar porque siempre habrá palabras y disposición para conectar con ellas, no hay necesidad de tener la razón, porque no buscas ganar sino que ambos ganen. 

Así pasa cuando piensas en equipo,

Feliz luna llena,

Anna Bolena ∞ AlasdeOrquidea