Sábila | la planta mágica para la mujer

Esta es una de mis Sábilas

Esta es una de mis Sábilas

Antes de hablar de la Sábila quiero recordar a mi nana, Inés, que no sé qué será de su vida pero sé que el amor nos une en la distancia. Ella es a quien le debo mi amor por las sábilas, desde que soy pequeña vivo entre ellas y cuando me fui a vivir sola a un departamentito, ahí también, tenía mi sábila.

**aprende a cortarla, si no sabes cómo, hasta el final de este escrito. 

Es por medio de esa planta que yo me he conectado con la tierra sin importar el piso en el que viviera, sin importar si tenía balcón o mi vista era hacia las azoteas de otros edificios (gracias adorada CDMX), en mi ventana siempre estaba mi sábila con su moñito rojo. 

Una de las formas en las que más he conectado con esta planta es en forma de óvulos para la salud vaginal. Desde que me llegó mi primera regla, Inés, me dio los óvulos, hasta el día de hoy continúo con ese hábito. 

La uso para la piel, para tomarla en forma de espuma cuando hay cólicos pues uno de los beneficios que tiene la sábila y que no conocemos es que es antiinflamatoria, es por eso que, también, es tan buena para la piel con tendencia al acné. 

Si la mezclas con yogurt griego, por ejemplo, estarás dandole power extra a una mascarilla ancestral yóguica que le da vitalidad, elasticidad y brillo a tu piel.

Y ni hablar de mezclarla con aceites esenciales como incienso, rosas, lavanda, camomila, caléndula que son divinos para el cuidado de la piel. 

La puedes convertir en lubricante, crema, jugo, gel, hielo... mejor dicho, ¡qué no hace la sábila!

Mi abuela se refería a esas medicinas poderosas como "la mano de Dios en un frasquito" y creo que definitivamente las recetas con sábila, merecen esa sabia etiqueta. 

La Sábila sirve muy bien para quienes sufren de gastritis, les recomiendo la Espuma de Sábila para aliviar al momento las molestias y sanar de fondo las heridas de tu tracto digestivo. 

Congela una hielera con sábila licuada y usa cada cubito de hielo en la cara para reafirmar y dar tono o para cuando tengas los ojos hinchados o si te quemas la piel con el sol o se te pasaron las chucharadas de fiesta, o solo porque se siente sabroooooso.

Haz gel y aplícalo en toda tu piel para refrescarla y dejarla como nalga de bebé. 

Usa esos mismos cubitos para echarle a tus jugos o smoothies. En fin... la sábila es una planta superdinámica y lo mejor de todo es facilísima de cuidar.

CUIDADO DE LA SÁBILA

La sábila puede vivir sin que le eches agua durante mucho tiempo, te estoy hablando de semanas, ella sobrevivirá. Por ejemplo si te vas de viaje, no deberás preocuparte por ella. Si los gatos fueran plantas, serían sábilas. 

Sin embargo, para que tus sábilas estén gorditas y te den mucho gel, debes darle agua suficiente. Yo las riego cada ocho días las de adentro de casa y las del jardín no las riego casi nunca pues con la lluvia es suficiente. Ahora que estamos en verano sí que menos, están gorditas de tanta agua que han recibido, en invierno se adelgazan, pero si las quiero gorditas pues las riego cada ocho días y ya está.

O sea, esto quiere decir que la sábila puede tolerar agua todos los días mientras esté bien drenada. Con esto no te digo que le des agua diario, pero que tengas en cuenta que el dren es básico para la vida de tu sábila.

Yo recomiendo humedecer abundantemente la tierra de tu sábila cada 8 días, dejarla drenar y regresarla a su spot de luz. Si la quieres más gordita puedes subir la dosis a cada 5 o 6 días, depende de ti y de tu sábila. 

mi bebé más bebé

La sábila cuando está saludable se reproduce. Ese tema de la reproducción lo aprendí de mi amiga Susi que ama las sábilas, tiene un jardín de ellas en su balcón y les saca hijos como si fueran conejos. Todas las amigas tenemos sábilas de Susi y todas, de alguna manera, hemos sido testigos de estos hijos que han crecido en su jardín. 

Ahora, mis sábilas (que varias de ellas son hijas de las de Susi) tienen sus propios hijos que se convierten en plantas ritual de otras mujeres y así, las sábilas mágicas se van reproduciendo y llevando amor a nuestras casas y las de nuestras amigas, familiares y cercanas. 

En un nivel energético, la sábila es protectora, de hecho se dice que rodear tu casa con sábilas en puntos estratégicos, la protege 360 grados. Hay quienes (yo entre ellas) le amarran listones rojos en sus hojas con moñitos que significan protección integral. 

La sábila es una planta madre, sensible pero con una piel fuerte que nos enseña a estar presentes cuando la cortamos, nos enseña a volvernos pacientes con el olor y los sentidos, nos enseña a conectar con la suavidad de un interior cubierto, muchas veces, por espinas. 

Esta planta es una maestra que me ha acompañado toda mi vida y que sus beneficios se siguen mostrando, no me sorprende porque confío en todo el potencial de esta planta ciegamente, pero sí continúa admirándome que la Madre Naturaleza nos de medicina que podemos crecer en nuestros jardines, balcones o ventanas y que en solo una planta haya tantísisisisma sanación.

Una planta agradecida, abundante y simple, como todo está supuesto a ser...

Las amo,

Ana Bolena ∞ AlasdeOrquidea

Pd. Aprende a cortarla por si no sabes cómo: