Mi experiencia con el Rito del Útero

La primera vez que recibí un Rito del útero fue en Miami, en un círculo de mujeres muy hermoso que mi amiga Silvia Layle, mujer medicina y una de las personas más coherentes y congruentes que conozco, ofreció para su comunidad.

Yo ya conocía a Silvia, por eso sin dudarlo asistí, sabía que sería una experiencia preciosa. Y lo fue.

Ese día, lo recuerdo bien, recibí mucha inspiración para lo que en algunos años, yo también estaría ofreciendo.

Ahora me encuentro haciendo una formación de Mujer Medicina que durará unos meses y me tiene muy entregada. Lo primero que recibí fue el Rito del Útero y fue muy hermoso recibirlo no solo como alumna sino como parte de mis aprendizajes como Mujer Medicina.

Cuando una mujer se para frente a ti a recordar lo que como mujeres somos, entonces hay una explosión muy poderosa en ambos corazones tanto para la que lo recuerda como para la que recibe la información como memoria sagrada.

Para mí, transmitir el Rito del Útero es una labor que mi alma viene a hacer. Eso que nos hace mujeres, eso que nos hace creadoras, eso que nos hace alquimistas, es nuestro útero, y aunque te lo hayan sacado, tienes el espacio sagrado del útero, las conexiones, las memorias.

El Rito del Útero es una re-programación directo a nuestra energía femenina, de contención y de amor. Es una nueva información que invitas a tu cuerpo para que puedas vivir desde allí, para que las creencias que te oprimían salgan conscientemente y para que las limitantes o bloqueos puedan ser saltados como pista de obstáculos, pudiendo observarlos como eso: un obstáculo y saltarlo con estrategia.

Para mí, el Rito del Útero es un ritual para volverme a hacer amiga de mi proceso femenino, de mis ciclos, de mis cambios, y de todo aquello que se va presentando con las nuevas capas de la cebolla que se van pelando en el camino.

Como facilitadora de este Rito me gusta preparar a la mujer o mujeres que lo van a recibir porque creo que ningún proceso profundo comienza sin preparación de la mente, del cuerpo y del alma que es la que habla durante estos espacios.

Si mi cuerpo está pesado, no tengo energía para hacer alquimia, si no he preparado mi altar y mi collar de ancestras entonces no he puesto simbólicamente mi carga afuera y con el cuerpo pesado y las memorias en la espalda, la sanación se vuelve complicada.

Por eso, comenzar por unos días de preparación es muy bonito y nos va ablandando el corazón. Nos vamos abriendo, vamos conectando con lo que vamos a hacer y así, el día que recibes el Rito, estarás abierta, dispuesta y con tu energía lista para recibir esa sanación.

Lo mismo pasa con el proceso posterior a recibir el Rito, que son 21 días claves para sellar el trabajo que hiciste, para dejar bien claro en tu memoria lo que estás agradeciendo, perdonando, honrando, amando etc.

Durante estos 21 días le darás a tu cuerpo infusiones de hierbas de manera consciente e intencionada para limpiar tu útero desde lo físico hasta lo energético. Así como repetiras un mantra/oración que dejará muy claro en tu Universo interior el mensaje para tus mujeres anteriores.

Esto te va a equilibrar desde muchos aspectos. Las mujeres que lo hemos recibido somos la prueba fehaciente de que funciona en diferentes espectros. Algunas pueden decir que sus dolencias físicas del segundo chakra (ovarios poliquísticos, endometriosos, menstruaciones dolorosas, vaginitis, resequedad y otras muchas más) disminuyeron o desaparecieron por completo.

Otras mujeres pueden haber sentido el cambio de una manera más energética o emocional, incluso sentir que pudieron perdonar algo muy doloroso y soltar una relación que ya no estaba sumando.

Otras, puede que no hayan sentido nada específico, pero se sintieron más tranquilas, con menos ansiedad o reactivas frente a determinados contextos.

Lo que sí es seguro, es que ninguna mujer se va sin la medicina de este Rito. Incluso, la incredulidad o el sentir que no hicieron nada, hace parte del proceso de algunas mujeres, de las más escépticas y de algunas esotéricas también. No hay una regla o bueno sí: todo hace parte del proceso.

Este es un espacio que esta esperando por ti y puedes vivirlo de diferentes maneras:

En una SESIÓN PRIVADA, solo para ti, enfocada en tu camino y canalizada para tu proceso.

En un RITO DEL ÚTERO GRUPAL, en donde podrás recibir la transmisión de manera grupal y el acompañamiento cercano con el grupo. Además podrás sumar una sesión privada para aterrizar tu experiencia terapéuticamente y que tu camino sea más claro aún.

También puedes asistir al RETIRO MI DIOSA SENSUAL en donde hacemos la transmisión del Rito de una manera muy espectacular, en las montañas de Colombia y en un escenario que va a dejarte perpleja de belleza, amor y conexión.

Estoy segura de que esto hace parte de tu transformación.

Nada es casualidad, todo es sincronía.

Hayli, Hayli, Hayli

Annie.